martes, 2 de septiembre de 2014

EL VINO

 (Soneto)





















A su uso no ponemos ni una pega,
que néctar de los dioses es el vino,
y nos deja un sabor más que divino
cuando en buena compaña se trasiega.
 

 Así que voy derecha a la bodega
y vuelvo con un caldo del más fino,
y a todos los amigos les conmino
a brindar por la vida que nos lega.
 

 El vino nos desata la alegría
y canta desde dentro el corazón.
Que no nos falte nunca esta ambrosía,
 

 y que nunca nos falte su canción,
pues suena en su interior la poesía
en una sacrosanta conjunción.
 

 Carmen Aguirre
2/ 9/ 2014

4 comentarios:

  1. Respuestas
    1. Esooooooooooo, José María. ¡¡Viva el vino!! que es una de las mejores cosas de la vida. Doradas lágrimas de la tierra y sangre de Cristo.
      Besos grandes.

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  2. Bonito soneto acerca del vino que nos dejas.
    Un abrazo.

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    1. Gracias, Rafael. El vino, tomado en su justa medida, alegra los corazones y calienta la amistad.
      Un abrazo

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